Comenzamos un nuevo curso cuyo inicio no tiene nada que ver con el que hemos tenido otros años. Durante todo este tiempo hemos podido observar grandes cambios. Entre ellos, hemos aprendido a comunicarnos, a vivir y a hacer infinidad de cosas de un modo completamente diferente.

Comienza una nueva etapa que nos invita a tener la mente abierta, el corazón abierto, una voluntad sincera y abierta, especialmente, para acoger, acompañar, sanar, reflexionar y repensar la vida a partir de los valores que nos definen.

Nos espera un curso donde será importante plantear con flexibilidad la vida, donde será importante mirar desde diferentes perspectivas, dialogando y haciéndonos preguntas mediante una visión crítica de la realidad que busque, que sume y construya desde el Evangelio y sus valores.

Así que, este año, queremos que nos impulse el deseo de vivir desde un punto de vista crítico, para que ello nos enseñe una realidad diferente de la nuestra, nos ayude a vivir “Desde Dentro”, le dé la vuelta a aquello que en nosotros sea rígido, a aquello que pensamos que no se puede hacer o vivir de otra manera.

¡Que Jesús, Señor de Corazón y mente abierta, nos acompañe en este camino!